CENTRO DE SALESIANOS COOPERADORES "MARÍA AUXILIADORA" - MÉRIDA




Colegio Salesiano "María Auxiliadora" · Avenida Reina Sofía, 44 · 06800 MÉRIDA - ESPAÑA
cooperadores@salesianos-merida.com

El Centro de los Salesianos Cooperadores de Mérida tiene su sede en el Colegio Salesiano "María Auxiliadora" de la misma capital.
Erigido el 21 de abril de 2001, cuenta en la actualidad con 19 salesianos cooperadores que colaboran tanto en la Pastoral Juvenil de la Casa Salesiana de Mérida como en las comunidades parroquiales de la capital extremeña y en otras instituciones de la Iglesia Católica.

El Centro de los Salesianos Cooperadores de Mérida pertenece a la provincia salesiana "María Auxiliadora" con sede en Sevilla y que aglutina a cerca de 800 salesianos cooperadores de Extremadura, Andalucía y Canarias.

Tal y como soñó Don Bosco, somos una asociación pública de fieles, oficialmente reconocida por la Santa Sede. Formamos la tercera rama de las tres principales que conforman la Familia Salesiana, a saber, los Salesianos de Don Bosco, las Salesianas y los Salesianos Cooperadores. Nuestro superior es el Rector Mayor de la Congregación Salesiana, sucesor de Don Bosco.

Somos una asociación de fieles que viven su fe cristiana desde el carisma salesiano que compartimos, desde nuestra condición de laicos, con la Congregación Salesiana. Intentamos, con nuestra vida, desde la familia e insertos en la sociedad, servir a los jóvenes, especialmente a los más necesitados, mostrándoles el rostro solidario de un Dios que les ama y nos ama infinitamente, el Dios de Jesucristo.

jueves, 29 de diciembre de 2011

FELIZ NAVIDAD

(Don Bosco llama a la alegría y a la fraternidad a los bienhechores, a los padres y a los chavales del oratorio ante la gran fiesta del Nacimiento de Jesús, que viene a nosotros a salvarnos, a dar sentido a nuestra vida y a iluminar el horizonte humano).

Con ocasión de las Navidades de 1872, el 20 de diciembre Don Bosco recomendaba escribir a los padres y bienhechores de los chicos del Oratorio. “Es mi intención y mi deseo que lo hagáis. »Tuvisteis vacación el jueves? (Gritos espontáneos de: ¡sí! y ¡no!). Pues bien, mañana sábado, no se dé trabajo para el domingo en aquellas clases, en las que todavía no hubo vacación; dése en su lugar como deber de clase esta carta y los profesores hagan un esbozo de la misma. En la carta a los bienhechores no dejéis de poner estas precisas palabras:

«Doy las gracias a usted... por su bondad y todas las atenciones que tuvo conmigo; en las próximas Navidades no dejaré de pedir a Dios Nuestro Señor que derrame sobre usted sus bendiciones, le dé salud y prosperidad en sus asuntos temporales, y sobre todo le conceda después la eterna bienaventuranza en el Cielo”. Tened por cierto, hijos míos, que estas palabras causan siempre buena impresión en quien las recibe, porque dicen: -«Mira cómo éste, no sabiendo hacer por mí, me desea de corazón todo lo que más puedo y debo desear...En estas fiestas estemos alegres en hora buena; saltad, reíd, pero pensad también en el gran misterio que se está realizando: “Un Dios que se hace hombre!... Es preciso, no cabe duda, que nuestra alma sea algo muy grande cuando los Cielos y la tierra se conmueven, y todo un Dios viene a hacerse niño precisamente por mí», debe decir cada uno de nosotros. No nos pese, pues, hacer alguna pequeña mortificación por El...”

PEREGRINACIÓN A GUADALUPE







El cierre del primer trimestre del presente curso pastoral no se pudo dar mejor. Nos fuimos a los pies de nuestra Patrona, la Virgen de Guadalupe. Con un día estupendo, completamente despejado y con el frío característico de la época y del lugar, los salesianos cooperadores de Mérida pasamos un día de convivencia con la Señora de las Villuercas.

Tras la Santa Misa a las 12,00 h. nos dirigimos hasta el camarín de la Santísima Virgen, acompañados de un hermano de la Comunidad Franciscana de Guadalupe, que dio la casualidad que era emeritense y antiguo alumno de los Salesianos de León. Ante la imagen de Santa María proclamamos sus loas y pedimos por las necesidades de la Familia Salesiana de Extremadura y de todo el mundo, por la Iglesia y por quienes se habían encomendado a nuestra oración. No nos olvidamos de nuestros hermanos ausentes que no pudieron asistir, sobre todo por motivos de salud. Ante la presencia de nuestra Madre estuvo en ese instante todo el centro de salesianos cooperadores de Mérida.

Y de la misa a la mesa, tocaba dar cuenta de la sabrosa morcilla de Guadalupe (fue incluso el recuerdo que algunos compraron para llevarse a casa). Con un sol radiante que calmaba el frío reinante compartimos momentos de risa y charla. Tras la comida, muy bien servida, ocupamos literalmente el bar del Parador Nacional de Guadalupe para tomar café. Alguno casi da una cabezadita. Los cómodos sofás del lugar invitaban a ello.

Con algo de tiempo para poder comprar algún recuerdo (por supuesto, gastronómico), nos despedimos de Santa María de Guadalupe hasta otra ocasión. Y los hermanos salesianos cooperadores dimos por cerrado el primer trimestre del curso pastoral, ya que a partir de ese momento tocaba celebrar el último Domingo de Adviento y la gran celebración del Nacimiento de Jesús, la Navidad.

MÉRIDA CELEBRA A SU PATRONA, LA MÁRTIR SANTA EULALIA

Un año más la ciudad de Mérida celebró a su cristiana más importante, la Mártir Santa Eulalia, que sufrió martirio por defender su fe cristiana y a los suyos allá en el siglo IV en la antigua Emérita Augusta cuando sólo contaba con la edad de 13 años.

Santa Eulalia, que ejerce su patronazgo sobre la ciudad de Mérida y es una de los santos patrones de la Archidiócesis emeritense, fue proclamada también patrona de la juventud de esta diócesis en los DED de la pasada Jornada Mundial de la Juventud.

Más de 200 localidades en el mundo llevan el nombre de Santa Eulalia y otras 700 parroquias la tienen como titular.

Como cada año, en la noche del 9 de diciembre el paso de Santa Eulalia recorre diferentes calles del centro de la capital hasta llegar a la Catedral metropolitana, donde es recibida por el Deán-Presidente del Cabildo y los miembros de la parroquia de Santa María la Mayor.

El día 10 de diciembre, tras la Misa en la Catedral, la Mártir vuelve a su Basílica por el recorrido ancestral, que se pierde a lo largo de los siglos, por las calles que llevan su nombre. La Asociación de María Auxiliadora de nuestra casa salesiana estaba representada en dicha procesión. A la llegada de Santa Eulalia comienza la Santa Misa Solemne presidida por el Sr. Arzobispo.

Este año, al ser sábado el día 10, por la tarde el Arzobispo volvería a celebrar la Eucaristía con el Rezo de Vísperas del III Domingo de Adviento ("Gaudete") en la Catedral.

Santa Eulalia tiene el carácter de solemnidad en la ciudad de Mérida y es memoria obligatoria en toda la diócesis. Pero sobre todo hoy Santa Eulalia constituye un gran ejemplo para todos los cristianos en estos tiempos recios que corren para fe.

VIGILIA DE LA INMACULADA CONCEPCIÓN

Con motivo de la celebración del Cincuentenario de la presencia salesiana en la ciudad, el Colegio Salesiano de Mérida acogió este año la Vigilia arciprestal juvenil en honor a la Inmaculada Concepción de María en la noche del 7 de diciembre.

La animación litúrgica corrió a cargo del Movimiento Juvenil Salesiano, acompañado por los salesianos de Don Bosco y los salesianos cooperadores. La celebración, a caballo entre la oración y la catequesis, iba desgranando los momentos más importantes de la vida de María y lo que supone para la Iglesia, hasta el momento de la exposición del Santísimo Sacramento, acompañado por jóvenes que danzaban y reverenciaban al paso del Señor.

La animación musical corrió a cargo del grupo "Brotes de Olivo" que se desplazó hasta la capital de Extremadura desde Huelva y Madrid para esta celebración. La celebración fue presidida por el Director de la Casa Salesiana de Mérida y a ella acudieron jóvenes de todas las comunidades parroquiales de la capital con sus sacerdotes, así como personas encargadas del PDAV y de la Pastoral con Jóvenes de la Archidiócesis emeritense.

Cabe destacar que el altar estaba presidido por la bellísima imagen de María Inmaculada del siglo XVII que se conserva en un retablo barroco de la Catedral Metropolitana de Mérida. El M. I. Sr. Deán-Presidente del Cabildo Metropolitano en Mérida tuvo a bien ceder tan bella escultura para esta celebración.

Un chocolate calentito preparado por la casa salesiana, despedía a los asistentes a la celebración.